El 20 de mayo, el grupo panzer tomó la ciudad francesa de Abbeville, situada en la desembocadura del río Somme, y comenzó a avanzar hacia el norte a lo largo de la costa. Hacia el 26 de mayo, los británicos y los franceses se vieron obligados a retroceder hasta una estrecha playa que se encontraba en los alrededores de Dunkerque. El rey belga, Leopoldo III, capituló al día siguiente. Destructores y pequeñas embarcaciones de todo tipo consiguieron evacuar de Dunkerque a 338.226 hombres en un salvamento heroico propiciado por la actitud del general alemán Gerd von Rundstedt, que ordenó a sus carros de combate que se detuvieran a fin de preservarlos para la siguiente fase de la operación.
La campaña contra Francia comenzó el 5 de junio. Italia declaró la guerra a Francia y Gran Bretaña el 10 de junio. La Línea Maginot, que sólo dejaba a merced del enemigo la frontera con Bélgica, no había sufrido el más mínimo daño, pero el comandante de las fuerzas francesas, el general Maxime Weygand, no disponía de ningún medio para proteger París por el norte y el oeste. El 17 de junio, el mariscal Henri Philippe Pétain, nombrado jefe de gobierno el día anterior solicitó un armisticio, que fue firmado el 22 de junio, en el que se acordó que Alemania controlaría el norte y la franja atlántica de Francia. Pétain estableció la capital de su gobierno en Vichy el 1 de julio, en la zona no ocupada del sureste, y constituyó así uno de los regímenes colaboracionistas más significativos de cuantos se crearon durante la II Guerra Mundial.
2.6 Caida de Francia